Quién le iba a decir a Google que la metodología de gestión del trabajo que decidió implantar con tan sólo un año de vida, se extendería tanto, que a día de hoy son muchas las empresas que quieren incorporarla.

¿Pero en qué consiste esta metodología?

Los OKR, Objectives and Key Results (Objetivos y Resultados Clave), es una metodología de fijación de objetivos que promueve una forma de trabajo basada en resultados clave a conseguir.

De esta forma, podemos seguir un objetivo no sólo a través de las tareas que definen la consecución de ese objetivo, sino a partir de unos resultados o propósitos que deseamos conseguir. Ahí está la gran diferencia de esta metodología con respecto a otras.

Si llevamos la aplicación a casos concretos, podemos ver que muchas veces los objetivos planteados no se consiguen, por ejemplo, imaginemos un objetivo de productividad que implica la coordinación entre empleados. Si nosotros basamos sólo ese objetivo en conseguir un determinado ratio de productividad y tareas o acciones a realizar para conseguirlo, ¿qué pasa en el caso de que se realicen todas las tareas pero no se consigue el objetivo?

Si en vez de en base a tareas, organizamos los objetivos en resultados clave a conseguir será más fácil definir por qué no se consigue un objetivo o porque sí.

Básicamente en esto consisten los OKR.

En este vídeo puedes encontrar más información:

Pregúntanos si quieres más acerca de esta metodología y cómo implantarla en tu organización apoyada de tecnología.